¿Con qué limpiará el joven su camino?
«¿Con qué limpiará el joven su camino? Con guardar tu palabra» (Salmos 119:9. RVR1960).
La homosexualidad no es el pecado.
Aunque la homosexualidad es un pecado, no es el único pecado que excluye del reino de Dios y no es el pecado imperdonable. Jesucristo murió por los pecados de los heterosexuales y de los homosexuales que se arrepienten.
Pasando por el túnel.
«Ciertamente es bueno Dios para con Israel, para con los limpios de corazón. En cuanto a mí, casi se deslizaron mis pies; por poco resbalaron mis pasos» (Salmos 73:1, 2. RVR1960).
Aferrados a Cristo.
“Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer” (Juan 15:5. RVR1960).
Lamentaciones realistas.
“Por la misericordia de Jehová no hemos sido consumidos, porque nunca decayeron sus misericordias. Nuevas son cada mañana; grande es tu fidelidad” (Lamentaciones 3:22, 23. RVR1960).
¿Tocando fondo? ¡Hay esperanza!
Por lo que vemos en el Salmo 130, el autor de este salmo pasó por una experiencia de angustia que lo llevó a “tocar fondo”. Pero aun allí él encontró esperanza.
Tomando lo que es de Dios.
«Y dijo Pedro: Ananías, ¿por qué llenó Satanás tu corazón para que mintieses al Espíritu Santo, y sustrajeses del precio de la heredad? Reteniéndola, ¿no se te quedaba a ti? y vendida, ¿no estaba en tu poder? ¿Por qué pusiste esto en tu corazón? No has mentido a los hombres, sino a Dios» (Hechos 5:3, 4. RVR1960).
Portaos varonilmente.
«Velad, estad firmes en la fe; portaos varonilmente, y esforzaos» (1 Corintios 16:13. RVR1960).
¿Con qué limpiará el joven su camino?
«¿Con qué limpiará el joven su camino? Con guardar tu palabra» (Salmos 119:9. RVR1960).
La homosexualidad no es el pecado.
Aunque la homosexualidad es un pecado, no es el único pecado que excluye del reino de Dios y no es el pecado imperdonable. Jesucristo murió por los pecados de los heterosexuales y de los homosexuales que se arrepienten.
Pasando por el túnel.
«Ciertamente es bueno Dios para con Israel, para con los limpios de corazón. En cuanto a mí, casi se deslizaron mis pies; por poco resbalaron mis pasos» (Salmos 73:1, 2. RVR1960).
Aferrados a Cristo.
“Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer” (Juan 15:5. RVR1960).
Lamentaciones realistas.
“Por la misericordia de Jehová no hemos sido consumidos, porque nunca decayeron sus misericordias. Nuevas son cada mañana; grande es tu fidelidad” (Lamentaciones 3:22, 23. RVR1960).
¿Tocando fondo? ¡Hay esperanza!
Por lo que vemos en el Salmo 130, el autor de este salmo pasó por una experiencia de angustia que lo llevó a “tocar fondo”. Pero aun allí él encontró esperanza.
Tomando lo que es de Dios.
«Y dijo Pedro: Ananías, ¿por qué llenó Satanás tu corazón para que mintieses al Espíritu Santo, y sustrajeses del precio de la heredad? Reteniéndola, ¿no se te quedaba a ti? y vendida, ¿no estaba en tu poder? ¿Por qué pusiste esto en tu corazón? No has mentido a los hombres, sino a Dios» (Hechos 5:3, 4. RVR1960).
Portaos varonilmente.
«Velad, estad firmes en la fe; portaos varonilmente, y esforzaos» (1 Corintios 16:13. RVR1960).