La iglesia.
«Y yo también te digo, que tú eres Pedro, y sobre esta roca edificaré mi iglesia; y las puertas del Hades no prevalecerán contra ella» (Mateo 16:18).
¿Cuánto le debes a Jesús?
«Un acreedor tenía dos deudores: el uno le debía quinientos denarios, y el otro cincuenta; y no teniendo ellos con qué pagar, perdonó a ambos. Di, pues, ¿cuál de ellos le amará más? Respondiendo Simón, dijo: Pienso que aquel a quien perdonó más. Y él le dijo: Rectamente has juzgado» (Lucas 7:41-43).
¿Qué significa ser un discípulo?
Mientras Jesús suplía las necesidades de los que estaban a Su alrededor, Él escogió a ciertos individuos, llamados discípulos. Discípulo es aquel que sigue a un líder, para hacer lo que el líder hace y volverse como él.
El grabado de Dios.
«He aquí que en las palmas de las manos te tengo esculpida; delante de mí están siempre tus muros» (Isaías 49:16; RVR1960).
Los ídolos del corazón.
Un ídolo es cualquier cosa o persona que se adueña de mi corazón más que Dios. Dios, en Su amor, se opone a nuestros ídolos y nos llama al arrepentimiento.
Más que religión.
Hemos sido salvos sólo por fe en Cristo solo… ¿Viviremos en pecado, ya que no hay que ganarse el cielo? ¡No! Si fuimos unidos a Cristo, Su vida a de fluir por la nuestra.
El «negocio» de Pablo.
El hermano Enrique Crespo nos muestra el «negocio» que Pablo hizo: él cambió su gran reputación religiosa por conocer a Cristo, conocer el poder de Su resurrección, participar de Sus sufrimientos y ser semejante a Cristo en Su muerte.
La propiciación.
Propiciar es apaciguar el enojo de alguien ofendido. Cuando Cristo murió en la cruz, Él absorbió toda la ira de Dios y habiendo sido resuelto el problema de la ira de Dios, tenemos paz para con Dios por medio de la fe en Jesucristo.
La iglesia.
«Y yo también te digo, que tú eres Pedro, y sobre esta roca edificaré mi iglesia; y las puertas del Hades no prevalecerán contra ella» (Mateo 16:18).
¿Cuánto le debes a Jesús?
«Un acreedor tenía dos deudores: el uno le debía quinientos denarios, y el otro cincuenta; y no teniendo ellos con qué pagar, perdonó a ambos. Di, pues, ¿cuál de ellos le amará más? Respondiendo Simón, dijo: Pienso que aquel a quien perdonó más. Y él le dijo: Rectamente has juzgado» (Lucas 7:41-43).
¿Qué significa ser un discípulo?
Mientras Jesús suplía las necesidades de los que estaban a Su alrededor, Él escogió a ciertos individuos, llamados discípulos. Discípulo es aquel que sigue a un líder, para hacer lo que el líder hace y volverse como él.
El grabado de Dios.
«He aquí que en las palmas de las manos te tengo esculpida; delante de mí están siempre tus muros» (Isaías 49:16; RVR1960).
Los ídolos del corazón.
Un ídolo es cualquier cosa o persona que se adueña de mi corazón más que Dios. Dios, en Su amor, se opone a nuestros ídolos y nos llama al arrepentimiento.
Más que religión.
Hemos sido salvos sólo por fe en Cristo solo… ¿Viviremos en pecado, ya que no hay que ganarse el cielo? ¡No! Si fuimos unidos a Cristo, Su vida a de fluir por la nuestra.
El «negocio» de Pablo.
El hermano Enrique Crespo nos muestra el «negocio» que Pablo hizo: él cambió su gran reputación religiosa por conocer a Cristo, conocer el poder de Su resurrección, participar de Sus sufrimientos y ser semejante a Cristo en Su muerte.
La propiciación.
Propiciar es apaciguar el enojo de alguien ofendido. Cuando Cristo murió en la cruz, Él absorbió toda la ira de Dios y habiendo sido resuelto el problema de la ira de Dios, tenemos paz para con Dios por medio de la fe en Jesucristo.