Todas las cosas ayudan a bien [IV]
“Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados” (Romanos 8:28. RVR1960).
Todas las cosas ayudan a bien [III]
“Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados” (Romanos 8:28. RVR1960).
Todas las cosas ayudan a bien [II]
Las aflicciones ayudan a bien al (1) mostrarnos la consecuencia del pecado, (2) mostrarnos quienes somos nosotros realmente y (3) al purificar nuestras almas.
Todas las cosas ayudan a bien.
“Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados” (Romanos 8:28. RVR1960).
Todas las cosas ayudan a bien [IV]
“Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados” (Romanos 8:28. RVR1960).
Todas las cosas ayudan a bien [III]
“Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados” (Romanos 8:28. RVR1960).
Todas las cosas ayudan a bien [II]
Las aflicciones ayudan a bien al (1) mostrarnos la consecuencia del pecado, (2) mostrarnos quienes somos nosotros realmente y (3) al purificar nuestras almas.
Todas las cosas ayudan a bien.
“Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados” (Romanos 8:28. RVR1960).