Meditando en el Señor [II]
«Y no solamente con respecto a él se escribió que le fue contada, sino también con respecto a nosotros a quienes ha de ser contada, esto es, a los que creemos en el que levantó de los muertos a Jesús, Señor nuestro, el cual fue entregado por nuestras transgresiones, y resucitado para nuestra justificación» (Romanos 4:23-25, RVR60).
Nueva identidad y nuevo potencial en Cristo.
El cristiano tiene una nueva identidad (es muerto al pecado y vivo para Dios) y un nuevo potencial (es capaz de negarse al pecado y obedecer a Dios), gracias a la obra de Jesucristo.
Eres más que vencedor.
Ninguna experiencia –independientemente de cuán mala o dolorosa sea– en la vida de los siervos de Dios es capaz de separarlos del amor de Dios en Cristo. Y por eso somos más que vencedores.
Dios proveerá.
El Dios que ciertamente proveyó para nuestra necesidad más grande al entregar a Su Hijo Jesús por nuestros pecados, también proveerá para nuestras demás necesidades más pequeñas.
Todo va a salir bien.
Toda experiencia en esta vida de los que aman a Dios está al servicio de su beneficio y su bien último es ser conformados al carácter de Jesucristo.
Aceptándonos unos a otros.
“Por tanto, recibíos los unos a los otros, como también Cristo nos recibió, para gloria de Dios” (Romanos 15:7. RVR1960).
Tu futuro es brillante.
Dios está llevando a Sus hijos de las aflicciones del presente a la gloria futura de un cuerpo redimido y un mundo libre de corrupción.
Algo peor que Covid-19 y su cura.
¿Sabías tú que hay una enfermedad peor que la Covid-19? Sí, y es una enfermedad de la que CNN no te va a hablar. Una enfermedad de la que la ONU no te va a dar los síntomas. Una enfermedad contra la cual el gobierno ni Salud Publica están tomando medidas. Hoy quiero hablarte de esa terrible enfermedad, pero ánimo, también pienso hablarte de su cura.
Meditando en el Señor [II]
«Y no solamente con respecto a él se escribió que le fue contada, sino también con respecto a nosotros a quienes ha de ser contada, esto es, a los que creemos en el que levantó de los muertos a Jesús, Señor nuestro, el cual fue entregado por nuestras transgresiones, y resucitado para nuestra justificación» (Romanos 4:23-25, RVR60).
Nueva identidad y nuevo potencial en Cristo.
El cristiano tiene una nueva identidad (es muerto al pecado y vivo para Dios) y un nuevo potencial (es capaz de negarse al pecado y obedecer a Dios), gracias a la obra de Jesucristo.
Eres más que vencedor.
Ninguna experiencia –independientemente de cuán mala o dolorosa sea– en la vida de los siervos de Dios es capaz de separarlos del amor de Dios en Cristo. Y por eso somos más que vencedores.
Dios proveerá.
El Dios que ciertamente proveyó para nuestra necesidad más grande al entregar a Su Hijo Jesús por nuestros pecados, también proveerá para nuestras demás necesidades más pequeñas.
Todo va a salir bien.
Toda experiencia en esta vida de los que aman a Dios está al servicio de su beneficio y su bien último es ser conformados al carácter de Jesucristo.
Aceptándonos unos a otros.
“Por tanto, recibíos los unos a los otros, como también Cristo nos recibió, para gloria de Dios” (Romanos 15:7. RVR1960).
Tu futuro es brillante.
Dios está llevando a Sus hijos de las aflicciones del presente a la gloria futura de un cuerpo redimido y un mundo libre de corrupción.
Algo peor que Covid-19 y su cura.
¿Sabías tú que hay una enfermedad peor que la Covid-19? Sí, y es una enfermedad de la que CNN no te va a hablar. Una enfermedad de la que la ONU no te va a dar los síntomas. Una enfermedad contra la cual el gobierno ni Salud Publica están tomando medidas. Hoy quiero hablarte de esa terrible enfermedad, pero ánimo, también pienso hablarte de su cura.