Enviado con una misión.
Aunque Juan el bautista fue usado por Dios para grandes cosas, él no fue más que un hombre que preparó el camino de Jesucristo.
La pre-existencia de Jesús.
«En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios. Este era en el principio con Dios» (Juan 1:1, 2. RVR1960).
Evangelio de Juan: introducción.
«Pero éstas se han escrito para que creáis que Jesús es el Cristo, el Hijo de Dios, y para que creyendo, tengáis vida en su nombre» (Juan 20:31. RVR1960).
Señor, ¿a quién iremos?
«Le respondió Simón Pedro: Señor, ¿a quién iremos? Tú tienes palabras de vida eterna. Y nosotros hemos creído y conocemos que tú eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente» (Juan 6:68, 69; RVR1960).
4 ayudas para evitar el enfriamiento espiritual.
Jesucristo, antes de morir, nos llamó a permanecer en unión y comunión con Él, en Su amor, en obediencia y en dar frutos.
Yo Soy el Camino, la Verdad y la Vida.
«Yo Soy el Camino» nos dice que el hombre está perdido, Cristo es la reconciliación para encontrarnos con Dios. «Yo Soy la Verdad» nos dice que el hombre tiene el entendimiento entenebrecido por el pecado, Cristo es nuestra iluminación. «Yo Soy la Vida» nos dice que el hombre está muerto, Cristo es nuestra regeneración.
Enviado con una misión.
Aunque Juan el bautista fue usado por Dios para grandes cosas, él no fue más que un hombre que preparó el camino de Jesucristo.
La pre-existencia de Jesús.
«En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios. Este era en el principio con Dios» (Juan 1:1, 2. RVR1960).
Evangelio de Juan: introducción.
«Pero éstas se han escrito para que creáis que Jesús es el Cristo, el Hijo de Dios, y para que creyendo, tengáis vida en su nombre» (Juan 20:31. RVR1960).
Señor, ¿a quién iremos?
«Le respondió Simón Pedro: Señor, ¿a quién iremos? Tú tienes palabras de vida eterna. Y nosotros hemos creído y conocemos que tú eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente» (Juan 6:68, 69; RVR1960).
4 ayudas para evitar el enfriamiento espiritual.
Jesucristo, antes de morir, nos llamó a permanecer en unión y comunión con Él, en Su amor, en obediencia y en dar frutos.
Yo Soy el Camino, la Verdad y la Vida.
«Yo Soy el Camino» nos dice que el hombre está perdido, Cristo es la reconciliación para encontrarnos con Dios. «Yo Soy la Verdad» nos dice que el hombre tiene el entendimiento entenebrecido por el pecado, Cristo es nuestra iluminación. «Yo Soy la Vida» nos dice que el hombre está muerto, Cristo es nuestra regeneración.