Jesucristo espera nuestro amor incondicional.
“Les dijo Jesús: Venid, comed. Y ninguno de los discípulos se atrevía a preguntarle: ¿Tú, quién eres? sabiendo que era el Señor. Vino, pues, Jesús, y tomó el pan y les dio, y asimismo del pescado. Esta era ya la tercera vez que Jesús se manifestaba a sus discípulos, después de haber resucitado de los muertos” (Juan 21:12-14. RVR1960).
Bienaventurado los pacificadores.
“Bienaventurados los pacificadores, porque ellos serán llamados hijos de Dios” (Mateo 5:9. RVR1960).
La oración de Pablo por la iglesia.
“Por esta causa también yo, habiendo oído de vuestra fe en el Señor Jesús, y de vuestro amor para con todos los santos, no ceso de dar gracias por vosotros, haciendo memoria de vosotros en mis oraciones” (Efesios 1:15, 16. RVR1960).
¿Qué hace un pastor?
«Yo soy la puerta; el que por mí entrare, será salvo; y entrará, y saldrá, y hallará pastos. El ladrón no viene sino para hurtar y matar y destruir; yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia. Yos oy el buen pastor; el buen pastor su vida da por las ovejas» (Juan 10:9-11. RVR1960).
Jesucristo espera nuestro amor incondicional.
“Les dijo Jesús: Venid, comed. Y ninguno de los discípulos se atrevía a preguntarle: ¿Tú, quién eres? sabiendo que era el Señor. Vino, pues, Jesús, y tomó el pan y les dio, y asimismo del pescado. Esta era ya la tercera vez que Jesús se manifestaba a sus discípulos, después de haber resucitado de los muertos” (Juan 21:12-14. RVR1960).
Bienaventurado los pacificadores.
“Bienaventurados los pacificadores, porque ellos serán llamados hijos de Dios” (Mateo 5:9. RVR1960).
La oración de Pablo por la iglesia.
“Por esta causa también yo, habiendo oído de vuestra fe en el Señor Jesús, y de vuestro amor para con todos los santos, no ceso de dar gracias por vosotros, haciendo memoria de vosotros en mis oraciones” (Efesios 1:15, 16. RVR1960).
¿Qué hace un pastor?
«Yo soy la puerta; el que por mí entrare, será salvo; y entrará, y saldrá, y hallará pastos. El ladrón no viene sino para hurtar y matar y destruir; yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia. Yos oy el buen pastor; el buen pastor su vida da por las ovejas» (Juan 10:9-11. RVR1960).